La Jefatura de Gabinete, Política y Seguridad Vial de la Provincia de Buenos Aires, sostiene en su página web, que el objetivo de la fiscalización de velocidad es prevenir siniestros viales.
Un claro ejemplo de lo contrario es el radar, que el propio organismo indica su existencia en Ruta 41 Kilómetros 5 al 8 (de Castelli), con máxima de 40 Km p/h.
Dicho radar, por cierto mal señalizado, ha sido motivo de múltiples accidentes, con y sin consecuencias personales.
Evidencia de lo dicho, son los rastros de derrapes, caucho de las frenadas marcadas, partes de vehículos y restos existentes en el lugar, plantas chocadas por despistes, etc., lamentablemente se observa hasta la existencia de elementos personales y el calzado de la última mujer que perdió la vida en ese sitio.
Al constituirnos en la zona en cuestión, apreciamos que la repentina existencia del radar, sorprende a quienes circulan por el lugar sobre la Ruta 41, procurando bajar la velocidad a 40 km p/h, ante el temor de ser multados.
Tal repentina maniobra, por la mala señalización en tal insólita circunstancia, genera un caos entre quienes vienen circulando por el lugar.
Las características propias de la ruta 41, de una sola mano y con banquina de pasto en regular estado, no genera mucha escapatoria a los sucesos explicados, que justo se dan metros más adelante de la salida de una curva y peor aún en días de intenso tráfico por la época estival.
Tal coctel de circunstancias, generan un riesgo alarmante para quienes circulan por el lugar.
Las fotografías, que por razones de seguridad, ni siquiera fueron obtenidas un día de intenso tráfico, como son los días de recambio turístico, semanales y quincenales, ilustran por sí solas las circunstancias explicadas.
Pareciera que estos sistemas recaudatorios del estado, están por encima de los bienes y la vida de las personas.
Con las imágenes queda todo dicho, esperemos que Buenos Aires esté activa, para una pronta solución, ya que circunstancias como las relatadas son temerarias para quienes circulan por el lugar.