Lo aseguraron los investigadores tras recibir el informe preliminar de autopsia. Julio Arias murió de un paro cardiorrespiratorio traumático. El martes declara su nieta.
En sintonía con lo que el fiscal Fernando Castro adelantó cuando salió de la casa del barrio El Progreso donde un anciano fue asesinado el lunes a la mañana, el informe preliminar de autopsia confirmó que Julio Arias murió de un paro cardiorrespiratorio traumático. Para los investigadores, los delincuentes le taparon la boca con algún objeto para evitar que gritara.
El anciano de 96 años fue sorprendido esta mañana cuando su esposa –de 86- abrió la puerta del fondo de la propiedad ubicada en Rosales al 5900. Ya en el interior de la casa los delincuentes lo ataron y golpearon, además de taparle la boca con un objeto –presumiblemente una almohada- que provocaron que se ahogara y muriera asfixiado.
Dentro de las medidas adoptadas por la fiscalía, este martes la nieta de Arias prestará declaración. Castro le aseguró a 0223 que en las próximas horas, personal de la comisaría tercera y de la Coordinación Departamental de Investigaciones ampliarán las testimoniales de los vecinos.
“Los datos que pueda aportar la mujer servirán para confirmar algunas de las suposiciones que tenemos en cuanto a los objetos robados en la casa y la vía de escape usada por los autores del hecho”, concluyó.