“Vamos a terminar con la cantidad de feriados”, anunció el candidato de Cambiemos, Mauricio Macri, y desencadenó una avalancha de réplicas que el propio Scioli coronó: “Les pido a los trabajadores que respondan en las urnas”, dijo.
A días del balotaje que definirá la sucesión de Cristina Fernández de Kirchner, Mauricio Macri pisó el palito y todo el sciolismo, con el Gobernador incluído, salió a hacérselo pagar. La ocasión le quedó servida a la Ola Naranja cuando Macri se metió con los feriados: “Es un tema que no fue bueno para el país ni para el turismo. Iremos viendo qué es lo que vamos a hacer”, prometió, tras lo cual remató: “Vamos a terminar con la cantidad de feriados”.
Ágil por demás, la tropa sciolista salió a embanderarse con esa política. El propio Scioli tomó la posta y le explicó, con algo de vocación pedagógica, la utilidad de la medida para promocionar el turismo: “La gente cambió la forma de vacacionar. Donde hay un fin de semana largo, hay trabajo”, explicó, y remató con una fuerte consigna: “Yo le pido a los trabajadores que le respondan en las urnas”.
En un sentido parecido se expresaron los titulares de Turismo a nivel Nación y Provincia, Enrique Meyer e Ignacio Cortto: “Macri habla con ojos de Buenos Aires y no tiene en cuenta al resto del país”, afirmó el Ministro nacional. “Los feriados son muy importantes para el movimiento turístico en todo el país, permiten mantener abiertos muchos establecimientos hoteleros y darle más vida a las comunidades locales”, agregó.
“Claramente Macri piensa que Argentina es la Capital Federal, porque la mayoría de las provincias ha sido muy beneficiada con esta política de feriados, entre ellas la Provincia de Buenos Aires, donde casi 420 mil personas dependen en forma directa del turismo”, indicó, por su parte, el bonaerense Crotto.
