Luis Arias se refirió a la violencia institucional y cuestionó la implementación de la policía judicial por no poseer autonomía de las fuerza de seguridad provincial.
En el marco del “Día Nacional Contra la Violencia Institucional”, el Juez en lo Contencioso Administrativo de La Plata, Luis Federico Arias, cuestionó el estado de situación de la fuerza de seguridad bonaerense, al tiempo que criticó que al Servicio Penitenciario bonaerense y a la aplicación de la policía judicial.
“Pude ver en varias ocasiones esta práctica que afecta sobre todo a los jóvenes pobres. Yo creo que hay un problema estructural en la Policía de la Provincia de Buenos Aires y el Servicio Penitenciario Bonaerense, sobre todo a partir del copamiento de las áreas de investigación”, aseguró el magistrado.
En este sentido, explicó que hasta el año 1998 la función de los jueces era la de investigar y juzgar, pero como “no les gusta ensuciarse las manos, le delegaban la tarea de investigar a la policía”. A partir de ese año, el sistema judicial cambia y la tarea investigativa pasa a formar parte de las competencias de los fiscales, aunque “empezaron a hacer lo mismo que los jueces y dejaron la tarea en manos de la policía”. Consigna Infocielo.
“La policía está para prevenir el delito, no para investigar; es gracias a esto que se ha convertido en una gran gerenciadora del delito”, agregó el juez platense
Cabe mencionar que la actividad fue organizada por la Facultad de Periodismo y Comunicaciòn Social y contò con la presencia de abogados de organismos de Derechos Humanos y otras personalidades del sector.
Por otra parte, el magistrado criticó la no aplicación del régimen de Policía Judicial. “Se está implementando pero son los mismo policías de seguridad los que se presentan a los concursos de la policía judicial”.
Por último, concluyó: “En La Plata tenemos 15 fiscalías, todas las causas penales contra la policía van a parar a dedo a la fiscalía Nº8 a cargo de Paolini; en 12 años de juez, todas las denuncias por violencia institucional que hicimos nosotros nunca prosperaron. Estamos en un serio problema: la policía de la Provincia y el Servicio Penitenciario, con la complicidad judicial y política, mantienen un orden. Yo siempre digo en el peor de los sentidos, que la provincia está en orden: el orden impuesto por la fuerza”.
