El economista consideró este martes que “emitir un bono a 100 años y tener demanda significa que el sistema financiero internacional confía más en Argentina”.
“La emisión del bono alivia la caja porque en este momento Argentina tiene que pagar muchos vencimientos de corto plazo y cada vez que vence un bono, tiene que ser costeado con otra emisión más los intereses, por lo que un bono de este tipo es una herramienta útil, que ya ha usado México y muchos países desarrollados de Europa”, destacó.
“Contra la crítica de que nos endeudamos a muy largo plazo, hay que mencionar que una cláusula en todos estos bonos indica que el emisor puede pre cancelarlo en cualquier momento. Si las condiciones financieras mejoraran, es decir colocarse en lugar de al 8% al 5%, nada le impediría al gobierno cancelarlo y emitir uno nuevo”, explicó.