Se sabe que Graciela Camaño es uno de los referentes del massismo que se opone a negociar una eventual unidad con el resto del PJ, fundamentalmente donde esté el kirchnerismo. No podía esperarse entonces que se manifestara positivamente con respecto a la reunión que se realizó el jueves en la UMET, de la que por el massismo tomaron parte -a modo personal, aclararon- los diputados Felipe Solá y Daniel Arroyo.
Este fin de semana lo dejó claro la jefa del bloque massista en la Cámara baja. Entrevistada por Radio Mitre, la diputada se manifestó “absolutamente contraria a esta jugada de algunos personajes”. Expresó que “hace tres meses tuvimos una elección, y lo que menos espera la gente de nosotros es que nos estemos juntando para ver cómo hacemos en la próxima elección, o que estemos autopromoviendo candidaturas”.
Para ella, “es de absoluto mal gusto no entender lo que le pasa a la gente”, y advirtió que “no podemos hacer ninguna evaluación política sin advertir que somos un país que viene con muchos años de pobreza, marginalidad y falta de trabajo. Ese tiene que ser el eje de la discusión y de la acción política”.
¿Unidad? Graciela Camaño fue tajante: “No puede existir un concepto tan abstracto como la unidad”, sostuvo, advirtiendo que “en una Argentina que camina cada vez más hacia un subdesarrollo y una ‘africanización’, los dirigentes políticos tienen que esforzarse para conseguir soluciones”.