El diputado Felipe Solá resaltó la reunión realizada el jueves pasado en la sede de la UMET, que calificó como “un puntapié inicial para la unidad de la oposición y, posteriormente, del peronismo”.
El legislador del Frente Renovador sostuvo que “esto fue un puntapié inicial. Dijimos ‘hagamos lo que podemos hacer’, y es hacer instalar el tema. El ideal -dijo-sería que de manera natural se diera que en otros lugares ocurra lo mismo. Que se sienten a conversar de los 6 o 7 temas más importantes de la Argentina”. En ese sentido aclaró que “no nos juntamos a rosquear un candidato, sino de lo que piensan de la economía, de la injusticia social, del sindicalismo, de estos tiempos y de a futuro”.
En diálogo con Radio 10, Solá señaló que “si dejar el pasado atrás es dejar las diferencias entre los dirigentes, estoy de acuerdo. Hay un gran porcentaje de votantes que no necesariamente tiene que ser peronista, ¿por qué hay que dejar el pasado atrás?”. Admitió que “hay que debatir sobre la corrupción. Nosotros somos hombres políticos y los hombres políticos no pueden dejar de debatir la corrupción. Porque sino vamos a llegar a la conclusión de que el político es corrupto o es amigo de un corrupto”.
“La gente se entera tardíamente de los hechos de corrupción. Hay una acumulación pasada y presente de acusaciones, de hechos de corrupción ciertos o no, y la cantidad lleva a un hartazgo”, precisó el exgobernador bonaerense.
Por otra parte, Felipe Solá señaló que “Cristina Kirchner es la que demostró más votos y la que suponemos todos que es la que tiene el techo más bajo. La (medición) más importante es la del techo, en la posibilidad de mirar el futuro”. En ese sentido señaló que “la idea mía es que la crítica al kirchnerismo debe pensarse dos veces, porque quienes hacen eso están ofendiendo a sus votantes. El kirchnerismo sigue siendo la esperanza para muchos argentinos y se debe respetar eso”.
De cara a las próximas elecciones, aclaró que “por supuesto que hay 2019 para una oposición seria que incluya al peronismo. Queremos arreglar el país y hay que construir una oposición seria. Uno de los mecanismo de Cambiemos es psicológico y buscan que el 2019 sea imposible. De un lado hay una era y del otro los nuevos”. Y concluyó: “Los nuevos son un desastre”.
Con relación a la pelea del Gobierno con los camioneros, Solá señaló que “el manejo que hace Macri con Moyano no tiene ninguna ética. Cuando le conviene lo ataca. Hay una idea de cazar personajes y mostrar el trofeo a la sociedad para mostrarle de que eso también es el cambio”. Y con relación a otros sindicalistas acosados judicialmente, quiso sacar chapa: “Yo fui el primero que buscó encanar a Balcedo”.
Sobre el caso Chocobar, Solá señaló que la ministra de Seguridad lo que busca es “asegurar el perímetro de la fuerza propia. La fuerza propia es una fuerza digamos macrista, derechista, que es el núcleo duro, que es una de las misiones de este gobierno. Aseguran el núcleo duro porque han caído las encuestas. Piensan que del otro lado no hay un núcleo duro que pueda crecer y vamos a organizarlo para tirar esa teoría”.
“Si me llama Macri me tomo un café con Macri. Si me llama Cristina me tomo con un café con ella. Con quien no tomaría un café es con Balcedo. Me tomo un café con quien me llame. No me jodan con las fotos”, reclamó.
Luego al ser consultado sobre el ministro de Finanzas, señaló que “hace rato que (Luis) Caputo y varios más están totalmente por debajo de la mínima ética necesaria para ocupar el puesto que ocupan. Lo que espero es que la justicia, que elije con quien apurarse, tenga la velocidad debida con el señor Caputo”.
