En medio de la polémica, el ministro de Justicia de Kicillof afirmó que el Poder Ejecutivo “no está facultado para decidir sobre morigeraciones de pena de los privados de libertad”.
El ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires, Julio Alak, salió al cruce de las acusaciones de la oposición y descartó la existencia de “un plan” para promover la excarcelación de presos.
Por lo tanto el Poder Ejecutivo provincial no está facultado para peticionar o decidir sobre libertades o morigeraciones de pena de los privados de libertad.
— Julio Alak (@Julio_Alak) April 28, 2020
“Niego categóricamente que en la Provincia de Buenos Aires exista un plan para liberar detenidos. La Constitución y las leyes solo facultan al Poder Judicial a detener, liberar o conceder prisiones domiciliarias”, manifestó Alak en su cuenta de Twitter.
De esta manera, el funcionario provincial sentó posición respecto a la polémica de las últimas horas en torno a la concesión de la prisión domiciliaria a internos con riesgos de contagio de coronavirus.
Acto seguido, Alak aclaró que “los pedidos de prisiones domiciliarias son solicitados mayoritariamente por los defensores públicos que dependen de la Procuración General del Poder Judicial”, y puntualizó que “de este órgano dependen los fiscales que están habilitados para consentir o apelar las resoluciones judiciales”.
“Por lo tanto el Poder Ejecutivo provincial no está facultado para peticionar o decidir sobre libertades o morigeraciones de pena de los privados de libertad”, subrayó.
Los pedidos de prisiones domiciliarias son solicitados mayoritariamente por los defensores públicos que dependen de la Procuración General del Poder Judicial.
Asimismo de este órgano dependen los fiscales que están habilitados para consentir o apelar las resoluciones judiciales
— Julio Alak (@Julio_Alak) April 28, 2020
