En el segundo encuentro entre esos actores se convino en lanzar una canasta de 60 productos esenciales y acelerar paritarias. No se acordó un bono, no tampoco otras medidas de shock. Fue Pablo Moyano, pero faltó Feletti.
El gobierno, la CGT y la Unión Industrial acordaron hoy promover una canasta de hasta 60 productos de primera necesidad a precios regulados, así como acelerar las paritarias para intentar contener la inflación y que los salarios no superen a los precios, en una reunión sin anuncios de fondos de la que no participó el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, el hombre de Cristina Kirchner en el equipo económico.
Por otra parte, y ante las tensiones en la economía que genera el actual escenario global, se conformará mesas de trabajo para diseñar e implementar medidas a administrar las dificultades de la actual coyuntura.
Estuvieron presentes los mismos jugadores que sellaron un consenso por escrito la semana pasada: el titular de la cartera de Economía, Martín Guzmán; sus pares de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y de Trabajo, Claudio Moroni, el presidente de la entidad fabril, Daniel Funes de Rioja, y sus contrapartes de la CGT (Héctor Daer, Carlos Acuña y Andrés Rodríguez). Pero el dato que llamó la atención fue la asistencia de Pablo Moyano.
Fuentes oficiales afirmaron que no fue invitado el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti. El economista era un partener previamente en esa mesa de discusión por la suba de precios coordinada por Guzmán, pero quedó afuera en el marco de la tirantez creciente en el Frente de Todos tras el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional
