La medida estaría vinculada a los recortes en la compañía. La ruta une las ciudades de Mar del Plata, Buenos Aires, Bahía Blanca, Trelew, Comodoro Rivadavia y Río Gallegos.
Aerolíneas Argentinas dará de baja el Corredor Atlántico, la ruta aérea que conectaba a Mar del Plata con otros cinco destinos del país: Buenos Aires, Bahía Blanca, Trelew, Comodoro Rivadavia y Río Gallegos. La medida, confirmada y publicada por el diario La Capital de Mar del Plata, quedará efectivizada a partir del 1º de octubre. El primer vuelo de esta ruta se llevó a cabo el 4 de julio de 2022.
“La idea es optimizar las rutas. El Corredor Atlántico partiendo desde Aeroparque no es eficiente como lo era el anterior, cuando salía de Ezeiza”, indicaron a La Capital fuentes aeroportuarias. No obstante, hay versiones que indican que las conexiones se darán de baja durante todo octubre y noviembre, para luego retomarse en diciembre, posiblemente en el marco de las fiestas de fin de año, pero no están confirmadas ni se conoce qué pasará durante la temporada de verano.
El contexto no queda desligado de esta medida. A fines de diciembre de 2023, con el cambio de gestión, asumió Fabián Lombardo como presidente y gerente general de la aerolínea de bandera, en reemplazo de Pablo Ceriani. En abril de este año, y en medio de los intentos del Gobierno Nacional de privatizar Aerolíneas Argentinas, Lombardo había adelantado en un duro mensaje interno a los empleados de la compañía que iba a tener que tomar “decisiones difíciles”.
“En un contexto en el que muchos argentinos están haciendo un gran esfuerzo por salir adelante, cada centavo que se aporta desde el Estado para que Aerolíneas subsista tiene que ser y va a ser cuestionado. Esto nos obligará a todos, y a mí en particular, a tomar decisiones difíciles. Puede que no estén de acuerdo en muchas de ellas, pero quiero asegurarles que las voy a tomar con el peso de la responsabilidad que cada una implique”, subrayaba el funcionario en aquel comunicado.
La decisión de dar de baja el Corredor Atlántico va en sintonía con la necesidad de “reducir a la mitad el déficit operativo de la empresa”, tal como planteó Lombardo a poco de asumir.