Luego de 28 años de diferencias políticas, el espacio liderado por Hugo Yasky resolvió la unidad del movimiento obrero
El candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, encabezó un acto en Lanús que selló el regreso de la CTA a la CGT. Lo acompañaron el camionero Hugo Moyano y el diputado Máximo Kirchner.
“Delante de todos ellos quiero poner en consideración del plenario nacional de la CTA la siguiente moción, que votarla con el cerebro pero hay que votarla con el corazón. Apostar al fortalecimiento del campo popular y de la lucha de la clase trabajadora que venimos impulsando en todo el país. Dando mandato a la comisión ejecutiva de la CTA de los trabajadores para iniciar el proceso de unificación con la CGT”, dijo Hugo Yasky. Por unanimidad, se votó el respaldo a la fórmula presidencial que encabeza Alberto Fernández.
En 1989 el alineamiento de la CGT y Carlos Menem provocó el rechazo por parte de una rama del sindicalismo argentino que se oponía a los planes de ajustes del presidente riojano. Fue Hugo Yasky quien dos años más tarde formalizó la creación de la Central de Trabajadores de la Argentina. Desde aquél momento fueron 28 años de fractura en los organismos representantes del sindicalismo nacional. Esta tarde en Lanús las divisiones gremiales comenzarán a sanarse en un Congreso de la CTA en el que se deliberará la fusión con la CGT.
El paso adelante para unificar lo más posible al movimiento obrero de Yasky llega en un momento electoral decisivo y agrada al propio Hugo Moyano, quien ve con buenos ojos la incorporación de la CTA a la Confederación General del Trabajo. El líder camionero junto a Héctor Daer comenzaron esa gestión por pedido explícito del propio Fernández. De hecho, a 24 días de las elecciones nacionales, el candidato presidencial será el principal orador en una demostración palpable del “pacto social” que viene pregonando a lo largo de estos meses de campaña. Por la magnitud del evento fueron invitados también Máximo Kirchner y Hugo Moyano, entre otros dirigentes del Frente de Todos.
En el escenario también estuvieron sentados Felipe Sola, Verónica Magario (intendente de La Matanza y candidata a vicegobernadora de la provincia de Buenos Aires), Gisela Marziotta (candidata a vicejefa de gobierno de la ciudad de Buenos Aires), Sergio Palazzo (La Bancaria), Víctor Santa María (SUTERH), Pablo Moyano (Camioneros), entre otros.
Luego tomó el micrófono Edgardo Depetri, candidato a intendente de Lanús: “Soy dirigente sindical y orgulloso de construir esta unidad con todos ustedes. Fue la base que nos permitió detener en tiempos de mucha oscuridad, en tiempo donde se nos quiso hacer creer el fin de la historia, el fin del trabajo, el fin del peronismo. Del estado de bienestar, que el único camino era abrazar las ideas del capitalismo: todas las compañeros y todos los compañeros le pusimos el cuerpo y siempre pensamos que había un camino distinto para la clase trabajadora argentina y para nuestro pueblo”.
En la pantalla, tras el discurso de Depetri, se exhibió un mensaje de Axel Kicillof, candidato a gobernador provincial: “Quiero mandarle un saludo enorme a los compañeros y compañeras de CTA, tanto a su militancia como a su dirigencia. Seguimos recorriendo la provincia de Buenos Aires para que más bonaerenses nos acompañen en estas elecciones. Los saludo, los abrazo. Hay que valorar el enorme trabajo que hizo la CTA para denunciar y marcar todos los desastres que se han hecho durante este período”.
Posterior a la oratoria de Magario y previo a que Alberto tomara la palabra, Máximo Kirchner expresó: “Cuando nos quisieron quebrar más nos unimos, cuando nos quisieron voltear, más resistimos. Y lo hicimos siempre teniendo en claro que había que construir una opción electoral. Que no solo se trataba de resistir. En esa estigmatización sería bueno que algunos sectores mediatizados de la sociedad comprendan que estos planes económicos nunca funcionaron. Muchas veces escuché al señor Presidente y a sus cortesanos expresar que los inconvenientes de esta economía no podía completarse por la resistencia de los compañeros y las compañeras que militan en las organizaciones sociales. Este plan económico fue el mismo que quiso aplicar la dictadura militar y que aplicó el 24 de marzo de 1976. El problema es el plan económico que un sistema financiero quiere imponer con un privilegio para unos pocos. Esto tiene que quedar claro”.
El diputado nacional criticó a Mauricio Macri por el discurso que brindó el día posterior a las elecciones del 11 de agosto. “A mí me tocó ver a Néstor perder con (Francisco) De Narváez y al otro día ponerse a laburar para la gente y no echarle la culpa. Hay que ser grande de corazón para dirigir los destinos de la patria”.
“En este lugar, en el microestadio de Lanús, se hizo aquel congreso que permitió que Néstor Kirchner fuera presidente”, expresó Fernández.
“Macri me convoca a un déjà vu . Para mí este presente me convoca a muchos recuerdos. Cuando miro el presente, y miro lo que vamos a encontrar, definitivamente lo que veo es casi un país como el que resolvimos en 2003. El daño de la convertibilidad es semejante al daño que hizo Macri gobernando cuatro años”, sostuvo el ex jefe de Gabinete.
“Cuatro años de Macri nos costó una devaluación del 500%. Yo me acuerdo que llegamos al gobierno y estábamos obsesionados con una deuda que teníamos con el FMI que se había acumulado. En el 2005 eran USD 9.800 millones, por generosidad del pueblo argentino, con ese pago, pasamos a la historia. En un año y medio Macri contrajo una deuda seis veces mayor. No le prestamos atención a estos datos. Hace dos años no pensábamos en el FMI”, sostuvo Fernández.
“Uno revisa las reservas. Si siguen perdiendo reservas como en estos días quedarán USD 10 mil millones, las mismas que recibimos con Néstor en el Banco Central. Han hecho el mismo daño que hizo la salida de la convertibilidad. Esto lo marco para que entiendan pro qué reaccionamos como reaccionamos. Gracias a Dios veo que muchos se han dado cuenta y decidieron dar un cambio en la Argentina. El cambio no son ellos, somos nosotros. No son ellos los que están capacitados para hacerlo. Todo como un volver a vivir”, agregó el candidato presidencial del Frente de Todos.
Luego, apuntó contra María Eugenia Vidal: “Queremos que cada vez, generación tras generación, sean mejores nuestras familiares. Hay quienes piensan, por ejemplo quien gobierna esta provincia, que crear universidad en el interior no tiene sentido porque los pobres no llegan a la universidad. Gobernadora despiértese: esas universidades está llena de hijos de trabajadores, de gente humilde que fue educarse allí y es necesario acercarle la universidad a sus barrios porque les cuesta mucho ir a las grandes ciudades para seguir estudiando”.
“En todos estos años de macrismo aprendimos todos. Siempre valoro la actitud de Cristina, que siempre fue generosa. Debo confesar que ni yo entendí su estrategia. Pero hay que reconocer que tuvo razón. Tuvo la enorme grandeza dar un paso al costado, más grandeza acompañarme a mí. Esos son los dirigentes que hacen falta. Un día aprendimos que todos dividimos no teníamos futuro. En la división, con poco más de 30 puntos, ellos ganaban. Lo que creo es que finalmente estamos ante un nuevo desafío, que no es simple. Yo no sé cómo hacen, la culpa siempre la tenemos nosotros pero los que tenemos que sacar a la Argentina somos nosotros. Siempre es lo mismo”, manifestó Fernández.
“Cristina tuvo un contexto internacional adverso. Ningún gobierno en democracia reconoció tantos derechos individuales a la gente como el gobierno de Cristina. Y empezó a tener problemas con la economía, le fue difícil, y dejó algunos problemas cuando llegó Macri. Y se multiplicaron por mil. Los argentinos tenemos tendencia a flagelarlos, a llamarnos incapaces. Nos han hecho creer somos una suerte de sociedad estúpida que cada 10 años se golpea con la misma piedra. Pero después de cada episodio trágico nos levantamos. Siempre nos levantamos. Vamos a levantarnos una vez más”, completó el candidato kirchnerista. Infobae.
Fotos: Franco Fafasuli