Tras conocerse las nuevas cifras de muertos y balances de contagiados del coronavirus, el gobierno de España puso en marcha el “estado de alarma”, un modelo de restricción de movimientos y bloqueo de la actividad comercial similar al que cumple Italia, al mismo tiempo que Francia, Estados Unidos y varios países latinoamericanos aumentaron las medidas de contención de la pandemia.
En España, el presidente del gobierno, Pedro Sánchez, anunció en un mensaje a la Nación un decreto que restringe a partir del lunes drásticamente la libertad de movimiento de los ciudadanos en todo el territorio nacional a situaciones de “fuerza mayor” o necesidad como la compra de alimentos, desplazamientos a hospitales y farmacias, así como para trabajar.
Con 191 muertos y más de 1.300 casos de contagios confirmados, las calles y los parques de España ya mostraron una merma de circulación de personas, pero las recomendaciones de Sánchez -que hoy se volvieron ley- no fueron cumplidas a rajatabla, como ya sucede en Italia, donde nuevamente las ciudades amanecieron desiertas y los balcones fueron escenarios otra vez de serenatas y aplausos colectivos.
En Italia, pese al alto acatamiento del “bloqueo total” anunciado por el gobierno esta semana, el jefe de la Protección Civil, Angelo Borrelli, informó hoy de un nuevo aumento de las víctimas.
“Murieron 175 personas de ayer a hoy y se registraron 2.795 casos positivos en todo el país”, explicó y destacó que se trata de una desaceleración con respecto a los 250 decesos registrados entre el jueves y viernes pasados.
Por el contrario, el número de contagiados diarios pasó de 2.116 a 2.795 en las últimas 24 horas.
En Francia, en tanto, también se confirmaron 839 casos nuevos en las últimas 24 horas, lo que lleva el número de enfermos con coronavirus a 4.500.
Los muertos, además, aumentaron de 79 a 91, según el Director General de Salud, Jerome Salomon, quien además advirtió que la “epidemia está ahora generalizada en todo el territorio”, según reprodujo la agencia de noticias DPA.
En ese contexto, el primer ministro francés, Edouard Philippe, anunció que esta medianoche todos los comercios -restaurantes, bares, cines, boliches y tiendas- quedarán cerrados para evitar la propagación del coronavirus.
No obstante, aclaró que los servicios básicos como farmacias, bancos y supermercados seguirán abiertos y que las elecciones municipales de mañana domingo siguen en pie.
“Debemos limitar de manera imperativa las reuniones, los contactos y los desplazamientos. Lo que debemos hacer en este momento es simplemente evitar todo lo posible los encuentros, limitar las reuniones de amigos y familiares, solo utilizar el trasporte público para ir al trabajo y eso solamente si la presencia física en el trabajo es indispensable, solo salir de las casas para hacer las compras esenciales, hacer un poco de ejercicio o votar”, aseguró en una conferencia de prensa.
De la misma manera, Israel también decidió cerrar durante cinco semanas las empresas y comercios no esenciales.
El país informó hoy que los casos ya ascienden a 193 y hay casi 40.000 personas en cuarentena forzada, entre ellos cerca de 2.500 trabajadores de la salud, según datos del Ministerio de Salud publicados por el diario The Jerusalem Post.
Estados Unidos aún no suspendió toda la actividad comercial, pero hoy el presidente Donald Trump sí extendió la prohibición de vuelos de y hacia países con casos masivos de contagio. Incluyó al Reino Unido e Irlanda, prometió test gratuitos para todos los que los necesiten -lo que hasta hora no sucedió- y también anunció que, tras días de reclamos públicos de medios y ciudadanos, decidió hacerse el análisis para ver si está enfermo.
En los últimos días, el mandatario estuvo en contacto con dos funcionarios brasileños que dieron positivo y ya están aislados.
El Congreso en Washington, además, dio media sanción al primer proyecto de ley de ayuda para frenar la pandemia, pero medios y analistas cuestionaron que no incluye a todos los trabajadores.
Mientras tanto, en América Latina, varios países continuaron endureciendo sus medidas para frenar la transmisión desde el exterior y evitar el contagio en sus territorios.
El gobierno venezolano de Nicolás Maduro ordenó el cierre cierre de cines, museos y restaurantes, así como la suspensión de espectáculos públicos, apenas un día después de que el mandatario decretara el estado de alarma y cancelara las clases desde el lunes por la confirmación de dos casos positivos.
“Deben evitarse concentraciones humanas comunitarias y cuidar especialmente a nuestros adultos mayores a 70 años”, explicó en Twitter la vicepresidenta, Delcy Rodríguez.
El presidente de Ecuador, Lenin Moreno, por su parte, anunció en Twitter que a partir del lunes se prohibirá el ingreso de todo extranjero al país y de ecuatorianos y residentes desde el día siguiente. También suspendió todos los eventos masivos, cerró varios pasos fronterizos, prohibió las visitas a geriátricos y pidió crear un protocolo especial para las visitas a las cárceles, entre otras medidas.
En Ecuador ya suman 22 los casos y solo una paciente ha muerto hasta ahora, según el gobierno.
En la vecina Colombia, en tanto, el gobierno expulsó a otros dos españoles -ya van tres con el de ayer- por no cumplir con el aislamiento decretado esta semana para todos aquellos que hayan llegado desde uno de los países foco de la pandemia.
“Son dos españoles que entraron a Colombia este miércoles o jueves y que ayer viernes salieron del hotel y recorrieron la ciudad sin cumplir con la medida de aislamiento, de la cual fueron informados a su llegada a la capital”, explicó una fuente de Migración Colombia al diario local El Tiempo tras las deportaciones.
Colombia también cerró esta semana los pasos fronterizos con Venezuela, lo que dejó a miles de personas que intentaban cruzar y escapar de la crisis humanitaria varados y en una situación aún más vulnerable.
El gobierno de Maduro le pidió hoy formalmente a la ONU que intervenga en la zona fronteriza para evitar que los venezolanos que buscan refugio fuera del país terminen usando cruces clandestinos y peligrosos, según informó Rodríguez, citada por DPA.
En tanto, el Gobierno de México anunció que a partir del 20 de marzo se cerrarán las escuelas primarias por un mes y los partidos de fútbol comenzarán a jugarse a puertas cerradas.