En un nuevo informe, estima que registrará una inflación del 88% y que el PBI crecerá solo 0,2%.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) modificó su proyección de inflación y de crecimiento económico de este año para la Argentina, al estimar que la suba de precios promedio en 2023 será de 98,6%, más alta que en 2022, y que el PBI terminará este año con una mejora de solo 0,2%, según publicó en el último informe de Perspectivas Económicas Mundiales (WEO, en inglés) que dio a conocer este martes.
De esta forma, el organismo dejó de lado sus estimaciones anteriores, que esperaban un 60% para la inflación anual de punta a punta y de 76% medida en promedio anual.
Estos cambios para la economía argentina están íntimamente relacionados con el impacto de la sequía y en el contexto de desaceleración mundial. Las estimaciones también van en línea con los recientes pronósticos similares del Banco Mundial, que la semana pasada divulgó sus estimaciones y proyectó que la Argentina no crecería en 2023.
“Los precios de las materias primas se disparan, la inflación alcanzó varias décadas máximos del año pasado en muchas economías, hizo que los bancos se endurezcan agresivamente con sus políticas para traerlo de vuelta hacia sus metas y mantener ancladas las expectativas de inflación”, con consecuencias negativas que aún se resentirán en la economía global, anticiparon.
Para el Fondo, la economía mundial se encuentra una vez más en un momento de gran incertidumbre, con los efectos acumulativos de los últimos tres años de shocks adversos, en particular, la pandemia de Covid-19 y la invasión rusa de Ucrania–manifestándose de formas imprevistas. estimulado por demanda reprimida, y persistentes interrupciones en el suministro”, resumió, en el arranque de su presentación
“Los precios de las materias primas se disparan, la inflación alcanzó varias décadas máximos del año pasado en muchas economías, hizo que los bancos se endurezcan agresivamente con sus políticas para traerlo de vuelta hacia sus metas y mantener ancladas las expectativas de inflación”, con consecuencias negativas que aún se resentirán en la economía global, anticiparon.