ENTRARON A ROBAR A SU CASA.
Un jubilado fue encontrado asesinado de varias puñaladas en el tórax y en el cuello, en su casa de la localidad bonaerense de El Talar de Pacheco, partido de Tigre, y la principal hipótesis que se investiga es el ataque en ocasión de robo, ya que su hija denunció que faltaba dinero de la vivienda, informaron hoy fuentes policiales.
La víctima fue identificada por la Policía como Benancio Ortiz (86), quien tenía dificultades motrices debido al mal de Parkinson que padecía.
El cuerpo del hombre fue encontrado cerca de la medianoche del lunes por su hija, Marcela Ortiz, quien pasó a ver a su padre luego de cenar con una amiga y su sobrino, que vivía con el anciano.
La mujer llegó a la vivienda situada en Libertad al 3100, de esa localidad de la zona norte del conurbano, y al ver que su padre no atendía sus insistentes llamados a la puerta decidió ingresar por una ventana semiabierta que da a la cocina.Cita El Día
Una vez en el interior, la mujer encontró a su padre muerto en el suelo, herido de varias puñaladas, junto a uno de los laterales de su cama, detallaron las fuentes.
A raíz de la recepción de un llamado al 911, efectivos de la seccional 5ta. de Tigre acudieron al lugar, junto con forenses y peritos de la Policía Científica que iniciaron los peritajes de rigor.
A simple vista los médicos legistas establecieron que el anciano presentaba dos puñaladas en el tórax y en el lado derecho del cuello.
Además, añadieron los voceros, tenía golpes en el rostro y en los brazos que indicarían que intentó defenderse ante el ataque.
Los pesquisas detectaron que las puertas no habían sido forzadas, aunque sí había una ventana abierta.
Además dos bombillas de luz de los plafones del pasillo de ingreso a la vivienda habían sido aflojadas, lo que fue interpretado por investigadores como una maniobra de quien cometió el crimen para no ser visto desde la calle.
En base al análisis de la escena del crimen y de testimonios obtenidos, los pesquisas trabajaban en la hipótesis de un homicidio en ocasión de robo.
Con el fin de identificar a los agresores, la Policía procuraba obtener imágenes de ellos que pudieran haber sido registradas por las cámaras de la zona.
Por su parte, los peritos que trabajaron en la casa encontraron huellas dactilares en varios sectores, mientras que debajo de la cama del sobrino que vivía con él, en otro dormitorio, hallaron un cuchillo tipo Tramontina con manchas de sangre que presumiblemente fue empleado para cometer el crimen.
Las fuentes dijeron que la vivienda estaba totalmente revuelta y que había algunos objetos rotos y tirados por diferentes sectores.
La investigación judicial se encuentra a cargo del fiscal Diego Molina Pico, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada de El Talar de Pacheco, quien caratuló la causa como homicidio en ocasión de robo.
El fiscal, perteneciente al departamento judicial San Isidro, ordenó nuevos peritajes en la vivienda de Ortíz y llamó a declarar a familiares para obtener testimonios que ayuden a la investigación.
La hija de la víctima contó que ella descubrió lo sucedido cuando llegó a la casa y su padre no la atendió, por lo que optó por ingresar por una ventana.
“Fue horrible. Yo conté ocho puñaladas. La casa estaba toda dada vuelta y desordenada y faltaban cinco mil pesos de su jubilación y un par de zapatillas de mi sobrino”, contó Ortiz conmocionada.
“Mi papá estaba enfermo y fueron muy crueles porque lo mataron por nada. Pido Justicia por mi papá y que detengan a los responsables del crimen”, añadió la mujer.
Ortiz contó que su padre vivía con su sobrino, ya que el padre del niño falleció hace unas semanas de muerte natural.
“Yo vine de San Luis para buscar a mi papá y a mi sobrino y llevarlos a mi provincia para que no se quedaran solos acá y pasó esto”, finalizó angustiada la mujer.
Foto ilustrativa
http://www.eldia.com/policiales/asesinaron-a-punaladas-a-un-jubilado-de-86-anos-con-parkinson-187579
